EN EL BARRIO DE GARRIDO FALTAN AL MENOS 30 PASOS DE PEATONES

Los pasos de peatones son la mayor garantía de que el tránsito peatonal en una ciudad sea seguro y accesible para todas las personas.  En la ciudad de los coches los pasos de peatones garantizan un derecho básico de sus habitantes a desplazarse caminando por sus calles de un lugar a otro.  No solo permiten el tránsito seguro, sino que también facilitan la articulación de dinámicas socioeconómicas urbanas muchas veces constreñidas por las altas densidades de tráfico motorizado y el ruido, las molestias y la inseguridad que estas generan.  Los pasos de peatones permiten abrir espacios para el paseo, conectar puntos de la ciudad y garantizar escenarios de seguridad para los más pequeños o los mayores, haciendo las ciudades más habitables y generosas.

salamancaenbici
Plano del Barrio de Garrido con la ubicación de los pasos peatonales inexistentes

En la ciudad de Salamanca es muy habitual ver intersecciones con solo tres pasos de peatones, un hecho insólito, sobre todo si tenemos en cuenta que ocurre en calles con poco tráfico y con una velocidad de los coches por debajo de la media.  Por eso, desde una perspectiva exclusivamente vial, no se entiende.  No parece necesario evitar los pasos peatonales por causa de la obstrucción que se produciría durante el giro al ceder el paso a una persona.

No encontramos explicación alguna a la ausencia de más de 30 pasos de peatones en un barrio denso y poblado como Garrido, con calles estrechas y plagadas de coches aparcados.  Recordemos que, además, los pasos de peatones en las intersecciones permiten ensanchar las aceras con “orejas peatonales” aumentando los espacios para “pasar” y “estar” o mejorando la seguridad durante el cruce de la calzada. 

En total se han contabilizado la ausencia de 31 pasos de peatones en el Barrio de Garrido (zona norte y zona sur) que se ubican en 26 intersecciones dónde de los 4 pasos peatonales posibles sólo hay tres o dos.  Ello genera pasos incompletos, interrumpiendo itinerarios peatonales, haciéndolos más intrincados e incómodos.  Y no solo eso, la ausencia del derecho a cruzar la calzada sin señalización genera conflictos innecesarios entre conductores y peatones, al no entender los primeros la prioridad que, según el sentido común, cabría esperar en muchas de estas intersecciones.

Se trata de una lacra muy sencilla de remediar.  En el total de los casos diagnosticados sería necesario pintar el pavimento así como crear rampas y pavimentos para invidentes y, por qué no, también “orejas peatonales”.  En otros muchos casos se podrían iluminar, elevar o ampliar o reubicar.... La creación de una ciudad accesible y moderna también depende de la generación de itinerarios peatonales cómodos e intuitivos, evitando cruzar la calzada más de una vez para poder cumplir con la mediocre estrategia vial de nuestras calles.  Es por ello, que proponemos la creación de un plan peatonal para completar los pasos peatonales del Barrio de Garrido, creando orejas peatonales atendiendo a todos los parámetros de la legislación vigente para asegurar el tránsito peatonal de todas las personas, incluyendo a las personas con movilidad reducida o invidentes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Salamancaenbici es un espacio abierto en torno a las dos ruedas y a la ciudad. Una ciudad con más bicis es más ciudad.