¿DÓNDE APARCAMOS PUES?

Dos notas en contra del aparcamiento de bicicletas.  La primera en una facultad de la USAL que en su momento no tenía aparcamiento, ahora sí que lo tiene.  La segunda foto corresponde a la falta de espacio en los alrededores de la Plaza Mayor.  Todas estas situaciones tienen su explicación y, si bien las quejas son comprensibles, responden a un déficit. ¿a cuál? pues a la escasa oferta de aparcamientos de bicicletas.  En definitiva, a una brecha entre la demanda y la oferta en el transporte ciclista.  La sostenibilidad en el transporte comienza por entender que todas las opciones de transporte son válidas y respetables.  Pero todas tienen que apoyarse y gestionarse adecuadamente desde los organismos públicos.  Los aparcamientos para bicicletas son una de las herramientas más sencillas para responder a una demanda cada vez mayor de personas que se desplazan por la ciudad pedaleando.